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DIFERENCIAS ENTRE EL BOTOX Y EL ÁCIDO HIALURÓNICO

El Botox® y los rellenos de ácido hialurónico son dos de los tratamientos más realizados en  medicina estética. Pese a ello, aun muchas personas confunden ambas sustancias y sus utilidades. De hecho, ¿nunca has escuchado eso de “Se ha inyectado demasiado Botox en los labios”?

Esto es técnicamente imposible, la toxina botulínica, más conocida por su nombre comercial Botox, nunca se inyecta en los labios ya que correríamos riesgo de paralizar los músculos que rodean la boca.

QUÉ ES EL BOTOX®

Botox® es el nombre comercial de una de las toxinas botulínicas existentes en el mercado. Durante años se ha usado en medicina, y en la década de los 90 se popularizó su uso en medicina estética.

Esta toxina funciona porque bloquea la conexión entre el nervio y el músculo, evitando la contracción de este y, por tanto, la aparición de arrugas.  Es perfecto entonces para esas arrugas que se forman a raíz de la contracción muscular reiterada, como por ejemplo la frente o el entrecejo. Su acción es más preventiva que curativa, ya que una vez se ha formado la arruga no la rellena. Además, es importante mencionar que es reabsorbida por el cuerpo por lo que para mantener el efecto es necesario reaplicar cada 4-6 meses.

QUÉ ES EL ÁCIDO HIALURÓNICO

El ácido hialurónico es una molécula que se encuentra de forma natural en nuestra piel y que la mantiene hidratada y elástica. A partir de los 25 años comienza a bajar la concentración de esta molécula en nuestra dermis, lo que provoca la sequedad de la piel y la aparición de las primeras arrugas.

La solución a este problema puede estar en microinyecciones de ácido hialurónico, que rehidratarán la piel y combatirán estas arrugas, rellenándolas al instante. De la misma forma puede aplicarse en aquellas zonas que, o bien no tienen el volumen deseado, o bien han perdido su volumen natural para rellenarlas y elevarlas. Hablamos de zonas como los pómulos, labios o los surcos nasogenianos.

Inyectándolo de la forma y en la cantidad adecuada el resultado es muy satisfactorios y natural.

En cualquier caso, sea cual sea tu problema o el tratamiento adecuado, recuerda que tiene que ser resuelto por un profesional de la medicina estética. Pide tu cita gratuita con la doctora Prieto y tras una evaluación te recomendarán la mejor opción personalizada a tus circunstancias personales.